Cecilia es una joven novicia estadounidense que viaja a Italia para tomar los votos después de que su capilla cerró. Allí, es bien recibida por la Madre Superiora y por el Padre del lugar que le cuenta su historia personal y oficia de traductor en la ceremonia religiosa. Cecilia también recibe una advertencia por parte de una monja que no está contenta con su llegada y le pide que piense bien antes de tomar los votos porque no hay marcha atrás. 

Algo oscuro se teje en ese convento apartado del resto del mundo y cuando Cecilia queda embarazada siendo todavía virgen, empieza a sospechar que hay algo macabro detrás.

“Inmaculada” es una película de terror con un manejo magistral del suspenso que me mantuvo en vilo desde la primera secuencia que narra el intento de escape de una monja. Su director, Michael Mohan, incursiona en el género por primera vez y sale airoso. De un guión simple supo hacer que cada objeto, cada espacio, cada diálogo, cobrará un sentido diabólico sobre una trama que cuenta solamente con un giro argumental bien empleado cerca del final. 

El protagonismo cae sobre Sydney Sweeney, que oficia además como productora ejecutiva, dando una gran interpretación como la Hermana Cecilia y coronándose como lo mejor del terror femenino en los últimos años. Le sigue de cerca el actor español Álvaro Morte como el Padre Sal Tedeschi y la pequeña pero potente actuación, de la italiana Giulia Heathfield Di Renzi como la Hermana Isabelle. El resto del elenco está correcto, cada uno en su rol. 

El terror religioso, católico en este caso, ha dado grandes ficciones como la siempre recordada “El exorcista” o la infravalorada “Estigma”. Sólo el tiempo dirá qué lugar tendrá “Inmaculada” con ese final alucinante que pondrá de cabeza a más de uno con cierta ideología extrema. 

Sydney Sweeney ya había demostrado tener dotes para el terror con la película “Nocturno” en donde interpreta a una pianista envidiosa de la destreza de su hermana gemela y en el thriller “Los voyeristas” del mismo director de “Inmaculada”.

Las escenas gore están bien usadas y causan impresión en la medida justa. Lo mismo para el uso de los polémicos “jumpscares”. 

Lo que me gustó del personaje de Cecilia es que es inocente, pero cuando queda embarazada sabe que hay algo que está mal. Nunca se la cree y busca la verdad con las escasas herramientas que posee. 

La ambientación es otro punto a favor, rodada enteramente en Roma. 

“Inmaculada” a mi parecer es lo mejor del terror estrenado en salas en los últimos meses. 

Título: Immaculate.

Dirección: Michael Mohan.

Elenco: Sydney Sweeney, Álvaro Morte.

País: Estados Unidos - Italia.

Año: 2024

Una monja estadounidense llega a un convento de la campiña italiana. Allí descubre que, a pesar de ser virgen, está embarazada. Al mismo tiempo, comienza a sospechar que algo perverso ocurre entre los muros del convento.