"Quizás una de las cosas más prácticas de ser escritora de ficción es que no se desaprovecha nada; cualquier experiencia sirve para algo; tiendes a verlo todo como una estructura potencial de palabras".
Siempre es un placer leer a Shirley Jackson, está vez con la maravillosa traducción de Paula Kuffer.
En esta selección de cuentos, si bien faltan algunos importantes como Summer people, incluye el mejor o al menos, el más escandaloso en su tiempo (y que sigue vigente hoy) La lotería.
Lo mundano con esta escritora toma otra dimensión y hay mucho subtexto entre sus párrafos.
El amantes demoníaco: una mujer espera la llegada de su amado para casarse.
La bruja: el encuentro de un niño con un extraño en un vagón de tren puede volverse perverso.
Después de usted, mi querido Alphonse: el racismo disfrazado de caridad.
Charles: una niña le cuenta a sus progenitores acerca de un compañero con mala conducta.
Siete tipos de ambigüedad: Una librería es el escenario perfecto para las apariencias.
La muela: Una mujer toma un micro a Nueva York para ir al dentista.
La lotería: una tradición da lugar a la crueldad en un pequeño pueblo.
Y la segunda parte del libro tiene consejos para el escritor amateur, experiencias y anécdotas de vida que no tienen desperdicio.
Una mujer incomprendida en su tiempo que gracias a los cambios sociales hoy encuentra un público lector ávido que la valora y la reconoce.
¡Larga vida a la obra de Shirley Jackson!